jueves, 3 de diciembre de 2009

REPORTAJE A LAS MARCAS PERUANAS: DUNKELVOLK Y MISION MISERICORDIA.







MADE IN PERÚ

MADE OF PERÚ
Producto peruano proyectado al mundo.
Siendo una de las más desarrolladas y promisorias industrias en el Perú, la textilería de manera esporádica se encuentra con oportunidades de vender más que materia prima o apenas procesada. La creación de marcas reconocibles, especiales y apreciadas por los consumidores, y ese es uno de los desafíos que aún enfrentan nuestros empresarios. Por ejemplo: nadie duda de la calidad del algodón peruano, pero apenas somos los proveedores de este insumo para marcas extranjeras ya posicionadas internacionalmente.





Por ello, en este reportaje destacaremos dos brillantes iniciativas que buscan promover el consumo de productos textiles peruanos y han delineado un horizonte organizacional que supera nuestros límites territoriales. En ambos casos, las visionarias empresas buscan vender el Perú al mundo a través de nuestros propios textiles.





ROMPIENDO OLAS




A partir del sueño de tres jóvenes amigos amantes del surf, Jano Sayán, Micky y Dieter Zúñiga, iniciaron la aventura de constituir una de las marcas locales más reconocidas y populares, no solo entre los tablistas, sino también entre miles de jóvenes de todo el país y el extranjero. DUNKELVOLK inició su travesía empresarial enfrentando el desafío de competir con marcas extranjeras ya posicionadas en el mercado peruano, tales como Billabong, Huntington, Quiksilver, Rip Curl, Diesel y Volcom, entre otras. La recién nacida compañía basó su competitividad no solo en el valioso recurso natural con el que fabricaban sus prendas, sino en una estrategia de elaboración de marca e imagen que afectó su señal ética, presencia, logotipo, definición de público objetivo y otras variables marketeras.




“Dunkelvolk es una marca 100% peruana, hecha por peruanos para todo el mundo, que comparte este sentimiento: el orgullo de pertenecer a una cultura milenaria, el placer de vivir en un país que es la cuna del surfing y donde sabemos vivir la vida de una manera sana y muy ligada a los deportes de acción. El público al que nos dirigimos es esencialmente todo aquel que es joven de mente y de espíritu, todo aquel que gusta de mostrar su identidad con ropa de primera calidad y con calidad de exportación”, declararon los dueños en una entrevista al diario El Comercio.




El slogan que los ha acompañado por años es el que da título a este texto: MADE OF PERÚ, procura demostrar que esta es una empresa que se distingue por pertenecer a una cultura rica y atractiva para el mundo, algo visible en la cálida recepción que la marca ha tenido en países como Estados Unidos, Brasil, Australia, Venezuela, Austria y Ecuador.




Estos empresarios reconocen haber tenido un éxito que se debe, tanto a la calidad de su material como al constante trabajo que han dedicado a la marca, y a buscar cada vez mayor impacto en la propuesta gráfica, el diseño, el marketing y la identidad de una empresa, que lleva una existencia inspirada en el amor por el Perú al igual que los deportes de aventura. Toda una muestra de lo vital que es para la industria textil peruana la aparición de iniciativas conscientes de que a Perú no le hace falta productos, sino marcas para vender.




LA MISIÓN DE LOS CAMPOS ELÍSEOS




Con innumerables casos que incluyen a Antonio Raimondi y María Reiche, en el Perú siempre vivimos la ironía de contar con recursos y potencial invalorables, pero por demás ignorados o dejados a un lado de manera flagrante; relegados hasta que la atención provenga de latitudes ajenas al banco de oro sobre el cual nos sentamos a mendigar plácidamente.




Un ejemplo moderno es el caso de un soñador inmigrante francés que puso en marcha desde 2002 un proyecto que combina creación y compromiso social. MISIÓN MISERICORDIA es una empresa llevada adelante por un joven mil oficios, galo (diseñador, dibujante, fotógrafo, director artístico, comunicador) que prefiere utilizar el seudónimo Aurelyen.




Este simpático y visionario empresario es la cabeza de una interesante compañía franco-peruana que se dedica a la fabricación de prendas de vestir que expresan la realidad del Perú, el país de adopción e inspiración de MISERICORDIA. Las labores de su director le hacen recorrer durante el año su tierra natal y el Perú, además de difundir la marca en el extremo oriente y la Unión Europea.




Aurelyen confiesa que la calidad de las prendas es un valor sumamente importante dentro de la empresa. La verdadera misión de MISERICORDIA se relaciona estrechamente con su percepción de la realidad sociopolítica del Perú, con el propósito de generar consciencia de ello en los consumidores que cada vez aumentan alrededor del globo.




A diferencia de otras marcas que promocionan al Perú, Misericordia no explota tanto la riqueza cultural o histórica del país, sino sus valores, necesidades y los desafíos que enfrenta como nación:




“Perú es un país de gran disparidad social. Conviene aquí la integración de los más pobres en un modelo económico y sacarlos de la precariedad. No es necesario introducir aquí el desarrollo incontrolado de los países ricos donde el dinero se volvió muy potente. Al contrario, es necesario inventar aquí un sistema alternativo donde el trabajo es un lugar de expresión y de experimentación, y donde cada uno reanuda confianza en sí y en sus capacidades.” Es lo que afirma una contundente declaración de principios publicada en su página web.




Misericordia es una compañía independiente y poseedora de una interesante mística de trabajo que los lleva a tomar como emblema a su equipo humano y sus curiosas modalidades de creación y distribución. La compañía declara manufacturar anualmente 15 mil prendas de vestir ya destinadas a un grupo de clientes. Su principal recurso para la distribución es la relación con tiendas definidas en distintos puntos del globo, aspecto que garantiza la viabilidad y el funcionamiento de una marca tan singular e irresistible por toda su filosofía y ética laboral.




Otro aspecto que demuestra la autenticidad de estos objetivos es que el rostro de la marca no le pertenece a modelos de aspecto y estilo europeo, procedentes de los sectores más pudientes de la ciudad, sino a muchachos y jóvenes de un look oriundo: mestizos, morenos y hasta de rasgos indígenas, rara vez vistos en los catálogos o revistas locales.




Los trabajadores hacen de MISERICORDIA una empresa que vive y proyecta peruanidad en todo el proceso de concepción, creación, producción y promoción de sus productos. La empresa declara que su emblema son sus obreros, y que su consigna es el trabajo en equipo de creativos y jóvenes con talentos nacionales que transmiten una imagen opuesta a la desigualdad y la marginación social.




COMPRADO AL PERÚ




Resulta pues excitante y prometedor ver que desde el Perú o afuera de él, existen visionarios que demuestran la capacidad de nuestro país para lanzar corporaciones que dejen huella en el mercado textil a nivel internacional, buscando formas alternativas para establecer marcas destacadas y de categoría que dejen la vía libre a productos que ya no necesitan demostrar su calidad, sino empezar a difundirla.




Los jóvenes peruanos entendemos mejor que nadie las facilidades que nos da la tecnología para estar al tanto de la aparición de iniciativas asombrosas como las de DUNKELVOLK o MISERICORDIA, empresas que también nacieron en las mentes jóvenes inspiradas por el país fascinante en el que vivimos. Lo único que necesitamos es estar convencidos de que contamos con una riqueza no solo cultural, histórica o geográfica, sino con el más precioso de los recursos que es nuestro talento y valor humano. Es por eso que existen cientos de razones, para amar y preferir lo nuestro, para impulsar y apoyar lo que nuestro Perú produce. La grandeza que su gente logra, y nos la entrega para sentirnos orgullosos y vestirnos de puro Perú.





4 comentarios:

Rubén A. dijo...

Rubén A.
Asi como estas empresas existen muchas mas que se preocupan por lo nacional en dar trabajo a mas peruanos. Apoyemoss lo nuestro a nuestra textilería peruana.

Anónimo dijo...

La verdad que te felicito brother esta buenazo este reportaje. como tu dices apoyar a lo peruanano es lo primero auque nos digan cholos por vertir full apaca o algodón pero usamos lo nuestro..

Raúl Torres dijo...

Bueno yo compro Peruano no porque sea nacionalista sino porque los productos peruanos en textilería son buenos hee. asi normal todos debemos comprarle al Perú.
y gracias por hablar de las gradezas que tenemos en nuestro paíss.

Pamela dijo...

Otra marca que desconocía, sería bueno saber más acerca de las productoras textiles peruanas y saber más de las marcas registradas de ropa en el Perú, que sigan asi chicos, interesante reportaje amigo Deyler.